Juego de improvisación.

La improvisación es libertad, pero cuánto realmente no hay de repetición en la improvisación músical. La improvisación cromática alejada de los concomitantes más próximos a la línea armónica sería el ideal de libertad en la improvisación. Sería además un producto inconsciente, onírico, una obra plena del hemisferio derecho del cerebro. Una sucesión de evocaciones a paisajes, onomatopeyas, cantos de aves, algo que no podría ser analizado mediante intervalos diatónicos o tensiones primarias de la sucesión de armónicos naturales. El ideal de la improvisación es ser melódico de la forma más libre y expresiva posible, ensanchar los límites de lo gratificante para el oido fuera de los lindes de los sistemas y formalismos, pero sin amaneramientos escénicos que abocan a las abstracciones intelectuales intencionadamente excéntricas, al ruido sonoro exhibicionista, al yokonismo. El problema es que para huir de algo primero hay que haber estado atrapado por ello, para huir del sistema hay que dominar sus normas y asimilarlas de tal forma que aquello que al principio requería un esfuerzo de atención consciente, una vez dominado pasa a ser una actividad inconsciente que no requiere del mínimo esfuerzo de concentración, tal cual el proceso de aprendizaje de mantener el equilibrio en una bicicleta. La improvisación es el estado de dominio absoluto de las normas del sistema por el inconsciente, de tal modo que toda la atención consciente pueda dedicarse a la forma expresiva. El aprendizaje tiene que regirse por el principio del mínimo esfuerzo consciente, es dejar que el trabajo de bestias lo haga el inconsciente, y el trabajo de creación, el que nos acerca a dios y a la verdad, nuestro yo consciente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

La asociación reivindicamos una piscina climatizada en Ribadesella.

 La asociación volvemos a reivindicar una piscina municipal en la cual puedan estar nadando los riosellanos, por las siguientes razones en o...